«El mayor castigo para quienes no se interesan por la política es que serán gobernados por personas que sí se interesan» (A. Toynbee)
Me quiero ir por el frio, lo descortés y la alevosía, deseo desaparecer por la desmemoria, por ser perchero de osos o formar parte de un calavernario ya solo relleno de tuétanos y vísceras secas.
Me quiero marchar de puntillas, para reposar con la dignidad que no tuve en el primer suspiro, con el ruido de motosierras, el festín de chistes de bata de cola y las pretenciosas noches de sombra sin ramas ni hojas.
Quiero irme sin frívolas despedidas ni dispendios, que ya para poco cuerpo es mucha urna y para tanto recuerdo muy poca compostura.
Boñar donde más corre el agua 